¿Qué hacer ante una inspección de trabajo? ¿Cómo hay que comportarse? Son algunas de las cuestiones que surgen cuando se plantea esta situación, en muchas ocasiones inesperada. Una empresa o trabajador autónomo es susceptible de recibir en cualquier momento la visita de un inspector. Por ello, es conveniente que se tenga toda la documentación perfectamente localizada y al día.

En este artículo se explica cómo afrontar una inspección de trabajo para que las empresas sepan a qué atenerse, qué documentos pueden ser requeridos y de qué plazos se dispone para reclamar ante una posible sanción, así como las acciones que pueden llegar a ser objeto de sanción.

¿Qué hacer ante una inspección de trabajo en Madrid?

El inspector que acuda, con o sin previo aviso, a un centro de trabajo actuará en representación de la autoridad, en este caso la Seguridad Social.

Por tanto, debe saberse que no se puede impedir que esta persona cumpla con su cometido, ya que, de lo contrario, tiene capacidad para requerir asistencia de las fuerzas de orden público que le faciliten llevar a cabo su labor.

No obstante, en caso de tratarse de un autónomo, si el centro de trabajo coincide con el domicilio, el inspector necesitará el consentimiento del trabajador o, en este caso, una orden judicial para poder acceder.

Durante una inspección de trabajo, este profesional podrá requerir que cualquier trabajador le acompañe en su visita, tener acceso privilegiado a todas las instalaciones (salvo que sean militares), pedir que se identifique a las personas que en ese momento se encuentren presentes en el centro de trabajo, reconocer el local, tomar mediciones, reclamar la presentación de la documentación pertinente y todas las acciones que estime oportunas.

Por la tanto, desde Ayce Laborytax siempre asesoramos a nuestros clientes que, ante una inspección de trabajo en Madrid, la actitud ha de ser colaborativa y debe accederse a todo lo que se solicite, ya que de lo contrario podría acarrear una sanción.

¿Qué es una inspección de trabajo?

La Ley de Inspección de Trabajo 23/2015, de 21 de julio, así como el Real Decreto 138/2000, de 4 de febrero, y la Orden Ministerial de 12 de febrero de 1998, establecen que la Inspección de Trabajo y Seguridad Social (ITSS) es una organización administrativa que se encarga de controlar y vigilar el cumplimiento de las normas de orden social y las responsabilidades administrativas que puedan afectar a empresas y trabajadores, así como asesorar a los mismos en materia laboral y de seguridad social.

El objetivo principal de esta organización es el impulso del cumplimiento voluntario de las obligaciones de las empresas y trabajadores en estos apartados, por lo que no es obligatoriamente necesario solicitar una inspección de trabajo ante cualquier irregularidad para que esta pueda producirse.

Cualquier empresa, negocio, persona física o jurídica, pública o privada, o comunidad de bienes, puede ser susceptible de recibir la visita de un inspector de trabajo sin necesidad de que haya un preaviso o se haya registrado denuncia alguna.

Cómo denunciar ante la Inspección de Trabajo

Además de por tratarse de una campaña de prevención o control rutinaria, una inspección de trabajo se puede producir por otros motivos. Principalmente, porque se haya registrado una denuncia contra la empresa por parte de un trabajador o se haya producido un aviso en el buzón de lucha contra el fraude que la ITSS pone a disposición de los ciudadanos.

La denuncia ante Inspección de Trabajo es la consecuencia de un conflicto laboral, que puede ser originado por diversos motivos.

Uno de los más comunes suele ser el mobbing. Un trabajador que esté siendo víctima de acoso laboral, bien por el menosprecio de su actividad por parte de un superior u otro compañero, por verse obligado a desempeñar tareas muy por debajo de su capacitación profesional o por ser apartado sin razón de sus labores, puede presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.

El inspector puede ejercer de mediador en el conflicto si el demandante así lo solicita, y la empresa se expone a sufrir una sanción por no adoptar medidas preventivas ante los riesgos psicosociales.

También se puede interponer una denuncia ante situaciones de irregularidad en cuestiones contractuales, o infracciones en tema de afiliación a la Seguridad Social, cotizaciones o prevención de riesgos laborales.

¿Qué se estudia en una inspección de trabajo?

La inspección de trabajo es una actuación preventiva, correctora o sancionadora que persigue el cumplimiento de la normativa vigente en temas laborales y de Seguridad Social.

Su cometido es el de supervisar que las empresas y trabajadores cumplan con sus obligaciones respecto al pago de las cotizaciones pertinentes y la afiliación a la Seguridad Social, entre otras cosas.

Si el inspector decide levantar un acta de sanción por considerar que se ha cometido una infracción, se recibirá dicho documento en un plazo de diez días por correo certificado.

Una vez recibida la notificación de la sanción, se dispone de un plazo de 15 días hábiles para presentar las alegaciones que se estimen oportunas.